Guatemala nunca ha participado en la Copa Mundial de la FIFA


Pero ahora está convencida de que podrá romper la maldición en su campaña hacia Brasil 2014. Al mediocampista Marco Pappa no le cabe ninguna duda: los Chapines pueden hacer historia. Esa es en cualquier caso la consigna de la selección en la competición preliminar de la CONCACAF.

El volante ofensivo del Fire de Chicago, de la MLS estadounidense, no cesa de repetir que hay que aprovechar la ocasión y sacar partido del presente para olvidar el pasado. Guatemala jamás ha disputado la principal cita futbolística del planeta, sin embargo, sus aspiraciones no carecen de fundamento, no en vano atraviesa un momento dulce tras alcanzar los cuartos de final de la Copa Oro de la CONCACAF 2011.

"Este equipo posee todo lo que se precisa para acudir a Brasil", aseguró Pappa a FIFA.com. A sus 23 años, el centrocampista representa a esa nueva generación rebosante de talento que acompaña a los inamovibles veteranos Carlos Ruiz y Guillermo Ramírez. "Para hacer realidad ese sueño, habrá que mantener la misma línea de conducta, saber qué es lo que queremos y no cambiar nunca de dirección. Sólo podremos hacerlo juntos, no hay otra manera", advirtió Pappa, un habitual del combinado nacional desde 2008.

Una mezcla perfecta: En sus dos próximas citas, decisivas para asegurarse el pase a la tercera ronda de los clasificatorios de la CONCACAF, los Azul y Blanco se desplazarán primero a San Vicente y las Granadinas y después recibirán en su feudo a Belice. Hasta la fecha, su balance en los preliminares es impecable, siguiendo la estela de su brillante participación en el certamen continental celebrado el pasado mes de junio. "La última edición de la Copa Oro ha sido la mejor experiencia de mi incipiente carrera. En ella aprendí muchísimo de la competición al más alto nivel", reveló el centrocampista, que se formó en el Municipal, al igual que el Pescadito Ruiz, en sus propias palabras "el modelo, alma y líder de un equipo en el que cada uno conoce bien su papel".

Derrotados en cuartos de final por México, que a la postre se proclamaría campeona, los Chapines están de enhorabuena por el regreso a sus filas, tras dos años de retiro internacional, del máximo goleador de la historia de la selección. Desde la Copa Centroamericana, los hombres de Ever Hugo Almeida están cosechando los frutos de "la perfecta mezcla de jugadores jóvenes y veteranos", según afirmó Pappa. Su contundente 4-0 contra San Vicente y las Granadinas en su primer compromiso de los clasificatorios y su triunfo por 1-2 en Belice en el segundo permitieron a Pappa y a los suyos hacerse con el liderato del Grupo E.

Sacar a la gente a las calles: Después de la decepción sufrida de camino a Sudáfrica 2010, los guatemaltecos pueden mejorar su registro si logran unir su nombre a los de Estados Unidos y Jamaica en la tercera ronda. "Ahora somos mejores que durante la campaña para la Copa Mundial 2010. La afición espera mucho de nosotros y estamos convencidos de que conseguiremos sacar a la gente a las calles para celebrar con alegría. Tenemos mucha más confianza en nosotros mismos", aseveró el astro del conjunto de Chicago.

El artífice de esta nueva mentalidad no es otro que el seleccionador Almeida. "El entrenador conoce al dedillo la liga y a los jugadores, tiene mucha experiencia. Es muy positivo y sabe cómo motivarnos. Nos estimula constantemente y quiere lo mismo que nosotros", explicó Pappa. "Está haciendo un gran trabajo". Su misión es devolver a la selección a su nivel de 2006, cuando Trinidad y Tobago le arrebató in extremis la plaza para disputar la repesca intercontinental. Y esta vez Almeida está decidido a llegar hasta el final.

Guatemala, que hasta ahora se ha ajustado sin problemas a su condición de favorita, no tendrá que enfrentarse en esta ocasión con los Guerreros Soca. "Evitar a México también está muy bien", admitió el volante del Fire. "Pero Jamaica tiene un gran equipo, y Estados Unidos es muy potente. Por eso, ahora más que nunca debemos mantener el espíritu competitivo hasta el final". El mensaje está bien claro: "Estamos listos, es nuestra oportunidad. La clasificación para Brasil será difícil, pero no imposible.