Courtois: "El Chelsea es favorito, el Barça también lo era…"
Tiene maneras de universitario aplicado, aunque sus casi 2 metros de altura y sus enormes manos le delatan. En la cancha, su aparente timidez deja paso a un aplomo impropio de sus 21 años. Seguro bajo palos y de reflejos felinos, Thibaut Courtois está considerado como uno de los mejores arqueros del mundo. Y vive la temporada de su consagración en la elite.
Cedido por el Chelsea al Atlético de Madrid desde hace tres años, el belga es uno de los pilares del proyecto con el que Diego Simeone está haciendo historia en el equipo rojiblanco, líder en la Liga y en semifinales de la Liga de Campeones 40 años después. Pero hay más: con sus atajadas, Courtois es una de las razones que explican el regreso de Bélgica a una Copa Mundial de la FIFA™ tras 12 años de ausencia.
Confirmada su participación en el duelo de Champions ante su ‘otro’ equipo, los Blues de Jose Mourinho, el arquero colchonero habló con FIFA.com de esta eliminatoria tan especial para él, de la lucha por la liga con Madrid y Barça, y de las opciones de Bélgica en Brasil 2014.
En 2012, a punto de ganar su primer título con el Atlético, nos decía que las finales son ocasiones únicas y que quizás no volviera a estar en otra. Pero ya ha ganado 1 Liga Europa, 1 Supercopa, 1 Copa del Rey…Y a 4 partidos para el final de la Liga, está a 3 victorias del título, y a 3 partidos de ganar la Liga de Campeones ¿Es más de lo que soñaba?
No esperaba esto. Recuerdo que jugué mi primer partido en Bélgica con casi 17 años y soñaba con una bonita carrera allí, pero no con jugar en un equipo grande o ganar títulos como esos. Y ahora estamos cerca del más importante, ¡la Champions League!… y también tenemos cerca la Liga que, estando Barcelona y Madrid, nunca piensas poder ganar. Ellos tienen mejores jugadores, pero nosotros tenemos un muy buen equipo, y eso es importante, porque no necesitas la ayuda de un jugador concreto para ser campeón.
Va a ser difícil repetir esto. Estamos haciendo un ‘temporadón’, y ya que hemos llegado hasta aquí, hay que intentar aprovecharlo. Si al final no conseguimos nada, será duro, pero no será porque no hayamos dado el 100%.
Cuando supo que se medirían al Chelsea en semifinales, y que va a poder jugar pese a su condición de cedido, ¿qué sintió?
Mucho alivio. Que nos toque el Chelsea, como en la Supercopa de Europa (ndlr: en 2012 el Atlético ganó 4-1), es especial para mí, porque estoy en el Atleti, pero el Chelsea también es mi equipo. Es mejor no pensar mucho y jugar como siempre, porque si piensas: ‘Uy, tengo que tener cuidado con lo que hago’, pues al final jugaré mal. Quiero ganar títulos aquí, y en estos dos partidos voy a ser del Atleti, pero para los demás también soy del Chelsea. Espero que ganen la liga. Eso sí, estos dos partidos no. Ojalá lleguemos a la final, porque estamos tan cerca… Ellos son favoritos, pero el Barça también lo era…
¿Cuál es la clave del éxito de este Atlético de Madrid? ¿Qué parte de culpa tiene Diego Simeone?
Simeone tiene mucha culpa de este éxito, porque él nos ha dirigido hasta aquí. En su primera charla, cuando llegó, nos dijo que tenía muy claro cómo quería hacer las cosas y cómo quería jugar. Esa claridad es una de las claves. Puedes volver al equipo después de 5 semanas fuera y sabes perfectamente lo que hay que hacer, porque la organización no cambia, sabemos qué debe hacer cada uno.
Toda su familia juega voleibol, ¿por qué se decidió por el fútbol? ¿Y por qué el puesto de arquero?
Mi padres han jugado en primera división en Bélgica, también al vóley-playa… Mi hermana juega en la selección y fue elegida recientemente mejor líbero europea. Incluso mi hermano juega, aunque lo compatibiliza con sus estudios. Cuando era pequeño, en el jardín de casa teníamos un campo de vóley-playa y me encantaba tirarme a por los balones. También cuando jugaba al fútbol. Así que cuando me dieron la opción de ser defensa o portero, me decidí por la portería… y me ha salido bien (risas).
En Bélgica lleva años siendo un ídolo, y hablamos de un país de grandes porteros: Jean Marie Pfaff, Michel Preud’homme… Obviamente no los vio jugar en directo, pero ¿ha visto sus vídeos o tiene otros referentes?
He visto vídeos, y me gusta ver cómo se situaban en la portería, pero el fútbol ha cambiado mucho. No puedes comparar jugadores de hace 30 años con los de ahora, porque se juega a otra velocidad, y un portero tiene que hacer mucho más ahora. Mis referentes, los porteros a los que admiraba de pequeño y en quienes me fijaba para aprender, eran (Iker) Casillas y (Edwin) Van Der Sar.
Hablando de su niñez, ¿cuál es su primer recuerdo de un Mundial?
Recuerdo la final del Mundial del 98, en Francia, y luego ya el Mundial de 2002, con Bélgica. Nuestro seleccionador, Marc Wilmots, jugaba en ese equipo y nos eliminó Brasil. El partido estaba 0-0. Metimos un gol, pero el árbitro lo anuló por una falta que no hubo… y bueno, ¡ése ha sido el último gran partido que han jugado los belgas en un Mundial! A ver dónde llegamos nosotros.
En Bélgica se ha generado una expectación enorme, ¿teme que les pueda pesar?
Vemos el Mundial como una gran experiencia para el equipo, y vamos a intentar llegar lo más lejos posible. La gente en Bélgica ya habla, incluso, de ganar o igualar la cuarta plaza del 86 (ndlr: mejor clasificación histórica del equipo). Hay que ser realistas, tener los pies en la tierra. Puedes ganar el grupo y que aun así que te toquen Alemania o Portugal. Igual ganas… ¡y te toca Argentina! Y están también Brasil, España… Hay tantos equipos buenos y con una experiencia que nosotros no tenemos… Tenemos muchos jugadores en equipos importantes, pero un Mundial es otro mundo. Hay que ir con humildad.
Hasta ahora, la temporada marcha de forma inmejorable… ¿cuál sería el final soñado?
Lo ideal, claro, es ganar la Liga, la Champions y el Mundial… Pero siendo realistas, espero ganar un título y llegar lo más lejos posible en el Mundial.
